Hacía tiempo
que tenía ganas de preparar un buen lemon curd y si llego a saber que era
taaaan fácil, no habría esperado hasta ahora para hacerlo.
Esta crema me
volvió loca cuando de pequeña mi madre compró un tarrito en una feria
alimentaria de diversos paises que hicieron en unos famosos grandes almacenes.
Rellenó unas minitartaletas como si fuera crema pastelera y creo recordar que
las decoró con algo de fruta, pero el sabor inconfundible del lemon curd me
hizo olvidarme del resto. ¡Qué cosa más buena!
Total, que
como hago siempre, busqué mil recetas y me aventuré a preparar la mía propia y
tengo que decir que salió deliciosa, así que aquí la comparto con todos
vosotros.
Ingredientes:
200g de azúcar
glas
2 limones
(necesitaremos la ralladura de la piel y el zumo de ambos)
100g de
mantequilla a temperatura ambiente
180g de azúcar
3 huevos
medianos
Preparación:
Yo lo preparé
con la Thermomix pero tiene que ser igual de sencillo hacerlo en un cazo al
fuego.
Primero
rallamos la piel de los dos limones vigilando de no poner nada de la parte
blanca, que amarga. En mi caso retiré cuidadosamente la piel y la trituré con
unos golpes de turbo pero creo que hubiera tardado lo mismo en rallarlos.
Mezclamos el
azúcar glas (vale hecho en casa, no hace falta que sea superfino) con la
ralladura de limón, incorporamos el zumo, la mantequilla y los huevos. Batimos
a mano para que se integre todo bien y lo ponemos al fuego lento removiendo constantemente
durante unos 10-15 minutos. En este caso sí que es más práctico hacerlo en la
Thermomix. Programamos 10 minutos a 90 grados y velocidad 2 y listo.
Parecerá que
queda una crema bastante líquida pero no os preocupéis, cuando enfría va
cogiendo cuerpo.
Se puede
guardar en la nevera durante varios días siempre en un bote de cristal bien
cerrado.
Una de las
cosas que aprendí en el curso de Seguridad Alimentaria que hice hace pocos días
en El Curso Rosa es que hay que enfriar lo antes posible las preparaciones. En
mi casa siempre se dejaba enfriar lo que fuera destapado en el mármol de la
cocina para luego taparlo y llevarlo al frigorífico. Pues no. Hay que enfriar
lo más rápidamente posible porque a los microorganismos les encanta
multiplicarse a temperatura ambiente, así que ahora que ya lo sé, metí el bote tapado
corriendo en la nevera.
Quiero
agradecer desde aquí a Chelo, José Luís y Eva el hacernos tan sencillo el
curso, tan ameno y tan entendible. Os recomiendo a todos que no dudéis en
apuntaros a la 3ª edición, que seguro la habrá, porque a cualquiera le puede
venir bien un poco de formación de este tipo sobretodo para quitarnos malas
costumbres que hacemos sin pensar.
Y el post de
hoy no se acaba aquí, no. Que cuando tienes lemon curd y no sabes donde
untarlo, va y se te ocurre que sería un relleno perfecto para unos cupcakes de
limón. Y allá que va una y se arremanga otra vez, que esto no ha sido nada.
No os diré
cómo quedaron porque esto hay que probarlo, así que aquí tenéis la receta.
Ingredientes
para los cupcakes:
150g de azúcar
150g de
mantequilla muy blanda
180g de harina
130ml de
buttermilk
Ralladura de
medio limón
1 huevo
½ cucharadita
de bicarbonato
Una pizca de
sal
Preparación:
Empezamos
preparando el buttermilk echándole a la leche (si puede ser entera mejor) un
chorrito de zumo de limón, mezclamos y dejamos reposar mientras pesamos y
tamizamos el resto de ingredientes.
Ponemos a
calentar el horno a 170ºC y colocamos las cápsulas dentro de los moldes.
Batimos la
mantequilla con el azúcar hasta que blanquee e incorporamos el huevo y el
buttermilk. Seguimos batiendo y agregamos la ralladura de limón y la mitad de
los ingredientes secos (harina, bicarbonato y sal) tamizados. Cuando esté bien
integrado incorporamos la otra mitad y batimos lo justo para ver la masa homogénea.
Repartimos en
los moldes hasta llenarlos 2/3 partes y los metemos en el horno durante 18-20 minutos. Como
siempre, se puede comprobar su cocción con el método del palillo. Pasado este
tiempo los sacamos del horno y los dejamos enfriar en el mismo molde unos
minutos y los sacamos de él para que terminen de enfriarse sobre una rejilla.
Ingredientes
para la crema de queso:
150g de queso
de untar tipo Philadelphia (graso, no vale light)
280g de azúcar
glas o icing sugar (en este caso mejor comprado que hecho en casa)
Un chorrito de
limón o dos cucharadas de lemon curd
Preparación:
Mientras se
enfrían los cupcakes, preparamos el frosting para decorarlos. Batimos bien el
queso con el azúcar glas, incorporamos el chorrito de limón o el lemon curd y
seguimos batiendo hasta obtener una crema densa y consistente y reservamos en
la nevera.
Cuando los
cupcakes estén frios, los descorazonamos con cuidado con un cuchillo y los
rellenamos con lemon curd.
Volvemos a tapar el agujerito y decoramos con la
manga y nuestra boquilla favorita con la crema de queso.
Podemos acabar
la decoración con un trocito de piel de limón confitada o rallada.
Veredicto y
observaciones:
Esta vez
quiero que el veredicto me lo déis vosotros porque veo que ya hay bastante
gente esperando la receta, así que entiendo que muchos intentaréis hacerlos. Si
os apetece compartir vuestros resultados, estaré encantada de verlos en la
página de Facebook de Descubriendo el Pastel.